lunes, 18 de marzo de 2013

Bob Marley.

-No vivas para que tu presencia se note, sino para que tu falta se sienta.

-Las guerras seguirán mientras el color de la piel siga siendo más importante que el de los ojos.
-Cuántas muertes más serán necesarias para darnos cuenta de que ya han sido demasiadas.
-Cuando una puerta se cierra, aunque no lo veas, otra se abre.
-Quien lo siente lo sabe.
-No olvides tu historia ni tu destino.
-Es tu amor lo que espero. Es mi amor de lo que huyes.
-Sólo tengo una ambición: ver a la humanidad toda junta, negros, blancos, todo el mundo viviendo juntos.
-La sabiduría es mejor que la plata y el oro.
-Los buenos tiempos de hoy son los pensamientos tristes de la mañana.
-No te preocupes por una cosa, concéntrate en que las pequeña cosas salgan bien.
-Levántate, ponte de pie por tus derechos.
-Mis pies son mi único vehículo, tengo que seguir dándole para adelante, pero mientras me voy, quiero decirte todo va a estar bien.
-Hay dos caminos; uno es la vida y otro es la muerte, y si vives en la muerte, entonces debes estar muerto. Y si vives en la vida, entonces debes vivir. El camino que tu corazón decide, hace que vivas.
-Mi música lucha contra el sistema que enseña a vivir y morir.


Tu jardín con enanitos - Melendi.

Hoy le pido a mis sueños 
Que te quiten la ropa 
Que conviertan en besos 
Todos mis intentos de morderte la boca. 

Y aunque entiendo que tú, 
Tú siempre tienes la última palabra en esto del amor 
Yo hoy le pido a tu ángel de la guarda 
Que comparta, que me de valor y arrojo en la batalla, pa’ ganarla... 

Y es que yo no quiero pasar por tu vida como las modas 
No se asuste señorita, nadie le ha hablado de boda 
Yo tan solo quiero ser las cuatro patas de tu cama 
Tu guerra todas las noches, tu tregua cada mañana... 

Quiero ser tu medicina, tus silencios y tus gritos 
Tu ladrón, tu policía, tu jardín con enanitos 
Quiero ser la escoba que en tu vida barra la tristeza 
Quiero ser tu incertidumbre y sobretodo tu certeza. 

Hoy le pido a la luna 
Que me alargue esta noche 
Y que alumbre con fuerza 
Este sentimiento y bailen los corazones. 

Y aunque entiendo que tú, 
Serás siempre ese sueño que quizás nunca podré alcanzar 
Yo hoy le pido a tu ángel de la guarda 
Que comparta, que me de valor y arrojo en la batalla, pa’ ganarla... 

Y es que yo no quiero pasar por tu vida como las modas 
No se asuste señorita, nadie le ha hablado de boda 
Yo tan solo quiero ser las cuatro patas de tu cama 
Tu guerra todas las noches, tu tregua cada mañana... 

Quiero ser tu medicina, tus silencios y tus gritos 
Tu ladrón, tu policía, tu jardín con enanitos 
Quiero ser la escoba que en tu vida barra la tristeza 
Quiero ser tu incertidumbre y sobretodo tu certeza. 

Y es que yo quiero ser el que nunca olvida tu cumpleaños 
Quiero que seas mi rosa y mi espina aunque me hagas daño 
Quiero ser tu carnaval, tus principios y tus finales 
Quiero ser el mar dónde puedas ahogar todos tus males. 

Quiero que seas mi tango de Gardel, mis octavillas 
Mi media luna de miel, mi blues, mi octava maravilla 
El baile de mi salón, la cremallera y los botones 
Quiero que lleves tu falda y también mis pantalones 

Tu astronauta, el primer hombre que pise tu luna 
Clavando una bandera de locura 
Para pintar tu vida de color, de pasión, 
de sabor, de emoción y ternura 
Sepa usted que yo ya no tengo cura sin tu amor.

martes, 12 de marzo de 2013

¿Que piensas?

Es una pregunta que nos hacemos continuamente mientras pensamos. Seguro que, como mínimo, una vez al día, desearías saber que piensan aquellas personas que te rodean, sobre todo si tus actos influyen sobre ellos. Pero ahora piensa, si tuviéramos esa cualidad, o mejor dicho, capacidad, la mitad de los hechos realizados no hubieran pasado y por mucho que nos arrepintamos, en esos momentos nos alegró, ¿por qué? fácil, porque lo hicimos con ilusión, como las mayorías de cosas que hacemos durante el día para disfrutar, sí, para disfrutar de las sorpresas que nos da la vida y si existiera esa capacidad de la que te hablaba, no existiría esos momentos inesperados que las mayorías de de las veces nos sacan una sonrisa, con esto quiero decir, que más vale controlar la impaciencia, ya que la espera trae buena recompensa unida a momentos de felicidad.